Abogados especializados en accidentes de yacimientos petrolíferos

El análisis estadístico demuestra una clara correlación entre la conducción de la industria petrolera y las colisiones de vehículos automotores. Un estudio publicado en Análisis y Prevención de Accidentes descubrió que los conductores de yacimientos petrolíferos se enfrentan a tasas elevadas de mortalidad de los trabajadores.

Los resultados de ese análisis demostraron que los conductores de la industria del petróleo y del gas tienen 8.5 veces más probabilidades de morir en un accidente automovilístico que los trabajadores de otras industrias privadas.

Mientras tanto, el Instituto Nacional de Seguridad Ocupacional y Salud informa que los accidentes automovilísticos, específicamente aquellos que ocurren a causa de la fatiga del conductor, son una de las principales causas de muerte en la industria del petróleo y gas.

Hay numerosos informes de conductores fatigados que se quedan dormidos al volante, lo cual provoca que choquen contra los vehículos que los rodean.

Si bien la fatiga del conductor es un riesgo en cualquier tipo de conducción comercial, los conductores de yacimientos petrolíferos están exentos de algunas de las reglamentaciones exigidas a otros conductores comerciales.

Estas reglamentaciones están diseñadas para brindarles a los conductores días libres y tiempo de descanso para garantizar que hayan descansado lo suficiente y puedan conducir de manera segura.

Sin embargo, debido a que se permiten excepciones en el caso de los conductores de yacimientos petrolíferos, sus trabajadores son más propensos a sucumbir a la fatiga del conductor, lo cual hace que se queden dormidos al volante o tomen malas decisiones mientras conducen.

Además, en algunos casos, las compañías que emplean a estos conductores alientan activamente a sus trabajadores a que regresen a trabajar a horario sin descansar adecuadamente entre los turnos.

Si un vehículo de petróleo o gas lo choca en Austin, puede tener motivos para iniciar un proceso judicial. Un abogado especializado en accidentes en yacimientos petrolíferos puede ayudarlo a solicitar indemnización por sus facturas médicas y otros costos incurridos a causa de su lesión.

Un equipo de abogados con experiencia de Austin también puede ayudar a llevar a cabo una investigación legal sobre las circunstancias detrás del accidente, y presentar una demanda por daños punitivos en caso de comportamiento imprudente.

Trabajar en la plataforma petrolera también es peligroso. Como cualquiera sitio industrial, las plataformas petroleras contienen muchos equipos peligrosos y condiciones peligrosas.

Y, por supuesto, el petróleo es altamente combustible. Los accidentes en plataformas petroleras no son infrecuentes, y las lesiones pueden variar desde huesos rotos hasta lesiones cerebrales traumáticas graves e incluso la muerte, especialmente cuando hay una explosión.

Cuando estas lesiones se deban a la negligencia de otra parte, especialmente de un empleador, las víctimas lesionadas y sus familias pueden tener un caso para recibir indemnización legal.

Los empleadores que no capaciten a los empleados, que no realicen mantenimiento a los equipos o que no exijan el cumplimiento de las normas de seguridad en el lugar de trabajo de forma adecuada pueden enfrentarse a consecuencias legales, si se puede demostrar que su negligencia fue una de las causas del accidente.

Un abogado especializado en accidentes en plataformas petrolíferas puede ayudarlo a investigar los factores que causaron la lesión y a decidir si tiene o no un caso.

Uno de los factores que más contribuyen a los accidentes de vehículos de petróleo y gas es la exención que goza la industria de ciertas reglamentaciones de conducción comercial.

De acuerdo con las reglamentaciones federales de autotransporte, la mayoría de los conductores comerciales deben descansar durante al menos 34 horas consecutivas después de trabajar siete (o, en algunos casos, ocho) días consecutivos.

Sin embargo, los conductores de yacimientos petrolíferos pueden reanudar la conducción después de tan solo 24 horas de descanso, lo cual significa que suelen tener menos tiempo libre entre los viajes.

Sumado a eso, se les permite contar el tiempo que pasan esperando en el sitio como tiempo de descanso fuera de servicio, incluso si no están descansando durante este tiempo.

Si bien estas exenciones son legales, con frecuencia se abusa de ellas, y existen otras conductas negligentes que contribuyen a la alta tasa de accidentes automovilísticos en la industria petrolera.

FVF descubrió un caso en el que se alentó a los conductores de la industria petrolera de Austin a infringir las reglamentaciones federales de seguridad de autotransportes al tergiversar la cantidad de tiempo que tuvieron entre los turnos.

Los informativos nacionales también han informado sobre el fenómeno. Ha habido varios casos en la industria del petróleo y gas de empleadores que presionan a los operadores para que conduzcan por encima del límite legal de 14 horas consecutivas.

Además, algunas compañías utilizan las exenciones para los yacimientos petrolíferos como excusas para llevar a cabo prácticas laborales peligrosas, lo cual obliga a los conductores a esperar períodos largos (a veces durante más de 24 horas) en el sitio de perforación, sin un lugar para dormir o descansar.

Estas condiciones, naturalmente, dan lugar a un aumento de la fatiga y del estrés del conductor. Además, la somnolencia es un factor en una cantidad considerable de accidentes automovilísticos, especialmente en aquellos que derivan en muertes o lesiones graves.

La Fundación AAA para la Seguridad del Tráfico, por ejemplo, descubrió que la fatiga del conductor fue un factor contribuyente en más del 10 % de los accidentes graves , aquellos que terminaron con daños materiales considerables, despliegue de bolsas de aire o lesiones.

El quid de la cuestión es que la fatiga es peligrosa al conducir.

Además, a medida que la fracturación hidráulica se adopta cada vez más, el potencial de accidentes en la industria del petróleo y gas puede aumentar considerablemente.

La fracturación hidráulica requiere cargas adicionales de agua y arena, que los conductores comerciales transportan al sitio de perforación. Esto significa más conductores somnolientos en la carretera y, probablemente, más accidentes como consecuencia.

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